Jason Becker, más que una leyenda, más que un guitarrista. Un ejemplo para toda la comunidad artística, para toda la humanidad. Sólo hablar de él me hace emocionar.
Este espectacular guitarrista y artista nace el 22 de julio de 1969 en Estados Unidos. Comienza a tocar la guitarra desde jóven, gracias a la influencia de su padre y su tio, ambos guitarristas, quienes lo introducen en el mundo de los clásicos clásicos: Bob Dylan, Eric Clapton, Jeff Beck, Jimi Hendrix, Van Halen e Yngwie Malmsteen. A su vez, y sobre todo gracias a la escucha de la obra de Malmsteen (que en esa època era resptable) y clásicos como Stravinski comienza a interesarse por el desarrollo de la música clásica en la guitarra eléctrica. Así, a partir de los fallos que notaba en el gran guitarrista sueco, comienza a desarrollar sus propios fraseos y modos de ejecutar distintas piezas clásicas, de oido.
A los 16 años conoce a otro virtuoso indiscutible: Marty Friedman (ex Megadeth), con quien consolidará una profunda y duradera amistad, y con quien para 1987 estará formando su primera banda, Cacochopny, con la cual editarán dos espléndidos discos (Speed Metal Symphony en 1987 y Go Off!!, en 1988), a partir de los cuales se podría decir que nace un nuevo estilo, fundado sobre la base de la fusión de los de cada guitarritas: Friedman, exótico, armónico, orientalista occidentalizado y Becker aportando sus influencias de la música clásica, sumadas a su gran habilidad técnica y a su gran corazón.
También en 1988 Becker lanza su primer disco solista, que será un disco legendario: Perpetual Burn. Disco en el cual el artista vuelca toda la carne al asador, poniendo en juego tanto sus influencias clásicas y barrocas, así como también la adquirida gracias a su padre y tio, más afianzada en el blues y el rock and roll, y finalmente, toda la experiencia adquirida tocando con su gran amigo Friedman. Así, tenemos un disco en el cual se puede escuchar Heavy Metal, Trash Metal, Metal Neo-Clásico, Blues, Música barroca, e infinidad de estilos entremezclados dando un resultado inigualable.
Este disco marca un quiebre, no solo en su carrera, sino en el devenir de la música en general (de lo que se puede considerar música, en el sentido más lato y concreto).
En el mismo año, gracias a una serie de demos en los cuales interpretaba canciones de Van Halen, Becker ingresa a la banda de solista de David Lee Roth, (Van Halen), como guitarrista principal, bajo la gran presión de tener que reemplazar a Steve Vai. El sueño del pibe se iba haciendo realidad. La carrera de este chico de tan solo 19 años no podía ir más que en subida. Pero no todo sería color de rosas.
En 1989 Becker es diagnosticado de Esclerosis Lateral Amiotrófica, extraña enfermedad en la que los músculos del cuerpo se van atrofiando de a poco, hastar perder completamente la movilidad del cuerpo, una enfermedad mortal.
Y hoy, año 2008, luego de 18 largos años postrado en una silla de ruedas (cuando los médicos pronosticaron no más de 3 años de vida), Becker nos trae otro gran disco: Jason Becker's Collection. Disco conformado en su mayoría por canciones emblemáticas del gran artista, así como también de algunas nuevas y espectaculares composiciones.
En fin, un disco que cuenta la historia de este gran artista, de este ejemplo para la humanidad, de este ejemplo para todos aquellos que creen que ya no pueden seguir adelante, que la vida los pasa por arriba y se dejan morir en la impotencia de la inercia cotidiana. Un artista que nos invita a reflexionar, y sobre todo, a dejar de lloriquear, y luchar en pos de nuestras metas, de nuestros sueños, de nuestras utopías.